Este es un trabajo elaborado por un equipo de docentes al que tengo la suerte de coordinar, como respuesta a una jornada institucional indicada por la Dirección de Escuelas en febrero de 2019. En esta transcripción, no figuran las consignas indicadas ni algunas apreciaciones internas sobre la funcionalidad de la escuela dónde trabajamos. Decidimos publicar los fragmentos que declaran las condiciones en las que trabajamos y los objetivos que tenemos como equipo de trabajo, además de responder a las políticas de educación, erráticas y alejadas de la realidad, no solo de este gobierno si no también de los anteriores.
Revisión de las prácticas pedagógicas para el ciclo lectivo 2019
Revisión de las prácticas pedagógicas para el ciclo lectivo 2019
Dada la nueva modalidad de evaluación,
podrían modificarse aspectos de interrelación entre asignaturas. Si bien
nuestro departamento trabaja coordinado entre profesores del mismo año y aun en
todo el ciclo superior, siempre es positivo revisar y mejorar las estrategias. De
proyectos en conjunto en donde distintos profesores evalúen una parte del
proyecto realizado.
También sumar y hacer más hincapié en el desarrollo del
alumno a lo largo del trimestre y del ciclo lectivo. Que un cierre de trimestre
no se sienta tanto como un punto cúlmine; intentar, con las actividades y el
tipo de evaluación, que los alumnos logren internalizar la idea de desarrollo
en la materia, y del trabajo durante todo el trimestre. Buscar que el alumno
entienda que el proceso educativo arranca en marzo y finaliza en febrero del
año siguiente. Si el alumno logra promocionar antes, es un premio, y no son un
castigo las mesas evaluadoras. Pero esta es una política que debiera ser del
Estado Provincial.
En relación a las prácticas pedagógicas consideramos necesario
profundizar el trabajo transdisciplinar dentro de la misma orientación. Este
año comenzamos a implementarlo pero quedó a mitad de camino la realización de
un estudio de mercado para conocer la imagen de diferentes empresas de
servicios y es muy enriquecedor el trabajo con contenidos y aportes de
distintas materias ya que permite observar la conexión que puede haber entre
ellas y que dejen de ser islas o materias aisladas. Esto nos parece importante
implementarlo con otras materias e incluso entre diferentes cursos ya que la
realidad que manejan los chicos hoy en día tiene más que ver con esto, con lo
dinámico con lo transversal y lo integral.
Nos parece interesante profundizar en prácticas pedagógicas que,
entre las distintas asignaturas, nucleen el conocimiento mediante un arsenal de
saberes, procedimientos y formas de desarrollo de cada alumno, comprendido como
un individuo y no como un número estadístico.
Más allá de eso, parece necesario implementar formas de llevar
realmente a la práctica los acuerdos departamentales, ya que en la mencionada
“agenda” docente actual, es realmente imposible que eso se lleve a la práctica.
Las reuniones
semanales de los docentes son hoy algo utópico, imposible debido a nuestros
horarios. Basado en un pésimo sistema de asignación de horas que nos obliga a
tomar módulos de a dos o tres horas en muchos colegios diferentes. Las horas
deberían salir por paquete de al menos ocho módulos, así el docente en un acto
público (que debería ser digital, online y transparente) accede a trabajar en
una sola escuela concentrada. Pero esto es algo que debe cambiar en la política
educativa desde el Estado con apoyo gremial.
Debería remarcarse lo distinto que tiene cada orientación. No
poner necesariamente el acento en la salida laboral, ya que actualmente no
tiene tanta incidencia en los chicos. Es
importante que el alumno tenga interés y motivaciones, por lo cual destacaríamos
lo que cada orientación tiene de fuerte, para así captar a los alumnos a
quienes les interesan esas actividades o sienten más afinidad. Especialmente
qué proyectos grupales, escolares e interescolares se realizan en esa
orientación. Si la escuela tiene por ejemplo radio, laboratorio de medios, etc,
para que la orientación sea más atractiva. Y qué proyectos pueden salir de la
escuela y realizarse en otros ámbitos, en cada una.
La continuidad y permanencia de las trayectorias escolares de los
y las estudiantes, no dependen como cita
el documento de los fracasos en instancias evaluatorias, sino de las
condiciones de posibilidad generadas por el contexto socioeconómico, que
atraviesa la vida de nuestra educativa.
Es pertinente dejar de hacer el foco en otras variables, porque la
política educativa está dejando de lado cada vez más la calidad académica y
parece que cada vez nos hace más responsables a los docentes. Los gobiernos
ignoran las realidades de las escuelas y parece que también de la sociedad.
Consideramos que una vez más se profundiza el seguimiento de
manera burocrática- que no ayuda ni tiene en cuenta cómo se desarrolla el
trabajo docente, especialmente de profesores y profesoras que no
tienen concentrados sus módulos, para evitar poner el foco en las problemáticas
contextuales por las que atraviesan en la actualidad la mayoría de las escuelas
de la provincia.
Se habla de la instancia de evaluación como situación
"traumática" sin tener acceso a un solo dato estadístico respecto a
cuáles son los factores reales que llevan al fracaso escolar. Resulta poco
serio. Consideramos que las evaluaciones deben ser constantes y formativas. No
sólo el resultado de una evaluación puntual sino de todo el proceso de
aprendizaje que el alumno lleva a cabo durante cada trimestre o con cada tema
Seguro es necesario repensar nuestras prácticas, pero éstas deben estar
acompañadas de políticas realmente serias, darle el valor que se merece a la
tan mencionada educación de "calidad" con los recursos
necesarios a tal fin y auténtico reconocimiento de la tarea docente por parte
de aquellos que nos gestionan y de toda la comunidad.
También nos preguntamos: Cuando hablan de apoyo y capacitación hablan de
lectura de normativas, documentos y bibliografía ¿Están hablando de
capacitación?, pues sería necesaria una oficial del Estado.
Elaboraremos proyectos entre asignaturas, los denominados
Aprendizaje Basado en Proyectos/Problemas (ABP) para que de ese modo sea más
“certera” y simple la evaluación. Si se va a hablar de evaluación conjunta
deberían revisarse las bases de la educación.
Las materias no tendrían que ser compartimentos estancos (algo que queda
en la retórica pero en líneas generales no sucede en la práctica) tendríamos
que hablar quizás de parejas pedagógicas, de curriculums que cambien en función de lo grupal, de tiempos y horas
extra PAGAS para que los docentes se reúnan a planificar y evaluar, y de
inspecciones que no torturen con el número de alumnos aprobados. Si la
evaluación es comprendida como proceso de crecimiento habría que ofrecer
también apoyo extra a alumnos que por diversas causas, desde cognitivas,
socio-familiares, psicológicas o simplemente de interés, no son capaces de
tener un buen desarrollo en una o todas las asignaturas.
No acordamos con la acreditación la evaluación colegiada y la rúbrica que
tenemos que elaborar, lo cual implica que no podemos colocar una nota muy dispar
de lo que acordamos, ya que un alumno puede ser excelente en lengua y no entender
nada de física, ya que todas las personas contamos inteligencias múltiples.
El nuevo proyecto engaña pensando que la solución a un alumno que no le gusta por ejemplo, la matemática, es pensar y tranquilizarse porque sí le gusta y es bueno en educación física. Una cosa son los intereses y las habilidades, las diferentes inteligencias de cada uno, pero la escuela no está sólo para remarcar UNA inteligencia que el alumno ya tenga dada, sino para ofrecer un abanico de posibilidades extra y desarrollarlo en todos los aspectos, incluso los que más le resulten inalcanzables.
Colaboraron en el presente documento las docentes Julia Raggio, Clarisa
Caballero, Carolina Barenbaum, Susana Juárez, Vanesa Cicchini, Mariel Barbosa y
Julia Beitelmajer. Compiló Hernán Bañez.
febrero de 2019